En julio de 1974, Carlos Leppe realizó en la galería Carmen Waugh el “Happening de las gallinas”. El título dado a la intervención es muy importante, puesto que tal como los “happenings” propuesto por Allan Kaprow, la acción implicó también una instalación en la que el público fue parte de una experiencia activa. La invitación al evento consistió en una tarjeta fúnebre que llevaba una cinta negra.
No existe un registro audiovisual de la acción, no obstante, contamos con fotografías y textos en prensa que nos permiten reconstruir lo acontecido. En todo el espacio de la galería, dispuestas en el piso o sobre plintos de color negro, se encontraban alrededor de un centenar de gallinas a escala hechas en yeso. Sobre un plinto de mayor tamaño se encontraban tres gallinas descabezadas. Entre los plintos se destacaba un pequeño escenario sobre el cual se encontraba una silla adaptada para contener huevos, en este lugar es donde Leppe realizó la acción. Paralelo al escenario y apoyado al muro había un ropero antiguo de dos puertas, que tenía adosado un cello al costado derecho y la puerta izquierda abierta, dentro del mueble había una serie de fotos familiares y tres huevos de yeso agrupados. Los cajones interiores del ropero se encontraban abiertos de modo tal que parecían una escalera y dentro de ellos había más reproducciones de huevos en yeso. De fondo sonaba “El día más hermoso”, canción dedicada a las madres, del bolerista chileno Ramón Aguilera.
La acción comenzó cuando Leppe ingresó a la sala con una corona de siemprevivas moradas puesta en su cuello y se sentó en la silla ubicada en el pequeño escenario. Una vez allí simuló que ponía un huevo, mientras que el público, que atiborró la sala, participaba de un cóctel en el que se repartía vino, pan amasado y huevos duros. Mientras se realizaba la acción, la crítica de arte Ana Helfant tomó una de las gallinas de yeso y la arrojó contra un muro, esto dio pie para que el resto de los asistentes tomaran las gallinas con total libertad. Una vez terminado el “Happening” habían desaparecido alrededor de 70 gallinas. “El happening” fue registrado y posterior a la inauguración se exhibió en la galería las fotografías de lo acontecido.